lunes, 25 de octubre de 2010

Por la recuperación de la maternidad expropiada

Por Jesusa Ricoy-Olariaga
Extraído de su blog.

Las mujeres gestan a sus hijos durante nueve meses, los alimentan, los mantienen así a la temperatura perfecta, y van con ellas a todas partes, creciendo en sus justas proporciones hasta llegar por fin al momento en el que están preparados para nacer. Entonces activan un complejo proceso químico y mecánico que los trae por fin a la vida fuera del útero. Al nacer lo primero que hacen es encontrar su fuente de alimento en el pecho de la madre. Lo consiguen a través del olfato, la vista, y pequeños movimientos. Se establece una comunicación de saliva, olores y suaves "golpes" con los puños que en secreto están generando el alimento que necesita para sobrevivir, lo hacen estimulando la producción de oxitocina en su madre, la hormona necesaria en el vinculo, producción de leche para expeler la placenta, contraer el útero y reducir hemorragias. Las hembras mamíferas se definen cómo tales por amamantar a sus crías. Esto es lo normal, lo olvidado, pero no obstante lo normal, en la gran mayoria de los casos...

Las mujeres me hablan de la necesidad de beber bebidas energéticas durante el parto, de tiempos establecidos para que el bebé este tumbado sobre su propio pecho (en inglés lo llaman “tummy time”) me hablan de aparatos para insertar en la vagina, para evitar episiotomias y tener mejor vida sexual, me cuentan técnicas para sacarse leche por si el niño pegará un estirón y a tu pecho le pillará “desprevenido” etc...Escucho con atención e incomprensión, sacudiendo mi cerebro por no poder sacudir mi cabeza, pero lo único que consigo descifrar es que todo esto son sintomas de una misma enfermedad social con un largo nombre:
“Nuestras-mujeres-no-pueden-parir-ni-alimentar-ni-cuidar-a-sus-bebés”
Hace ya algún tiempo que nos partieron las piernas para vendernos todo tipo de muletas...esto continua a día de hoy, y se hace más complicado por momentos.
Lo más increíble es que ya hemos llegado al punto de tener a nuestra disposición un artilugio que reduzca el riesgo de episiotomias, cómo si estás fueran algo espontáneo que nos ocurre sin ningún control, como al que le cae un tiesto de un balcón, les recuerdo que estás son llevadas a cabo por nosotros mismos.
De la misma manera que como tratamiento para evitar la inducción del parto, se nos introduce la mano en la vagina, para manipular la cervix y estimular las contracciones.
Intentar evitar la inducción a manos de los mismos que la administran...sigo sin entender.

Las mujeres hablan en foros sobre la libertad de elección, tiemblan ante la idea de imponer a otras como deben parir, alimentar o cuidar a sus bebés.
No consigo entender cómo hemos convertido el fomentar la salud, reivindicar una capacidad física que nos ha sido expropiada por intereses económicos y el proteger una herramienta esencial para la supervivencia de nuestra especie, en algo que sea un argumento politico, un debate sobre la libre elección o una opción intelectual.

Desde mi punto de vista, no conozco una mayor represión o imposición social, que aquella que no me permite parir, como y cuando quiero, aquella que no acepta ni social ni laboralmente mi maternidad, la que decide a través de interesés politicos y economicos, como alimento a mis hijos, la que me dice que mi cuerpo es un objeto sexual de quien lo mira y quién lo "usa".
No veo una mayor imposición para una mujer que la de un sistema que le exige que vaya contra su instinto, se tumbe y se abra de piernas y enseñe como pare a su hijo, por la comodidad de los observadores y por si hubiera que ayudarle.

La imposición social que ha enemistado a las mujeres con ellas y con las demás, y a los padres con sus hijos al convertir a los niños en estorbo social que hay que controlar y enviar a la guarderia lo antes posible, es una de las más tristes que conozco.

Si nuestra biología no encaja en esta sociedad, habrá que cambiar la sociedad y no al revés.
Si yo me pronuncio como mujer, madre, mamifero...sólo puedo existir en una sociedad que me acepte como tal, la alternativa es la negación de mi esencia, mutilación de mis atributos y en definitiva suicidio espiritual.

O sea que la historia se desarrolla más o menos así, las mujeres paren durante miles de años, tenemos éxito como especie, crecemos y de repente alguien interviene, esta intervención crea un montón de problemas, pensamos que estos problemas no han sido observados o atendidos antes, inventamos como solucionarlos, conclusión: la mujer no sabe parir, ni alimentar, ni cuidar de sus bebés...esto necesita observación, medición e intervención continua. Por otra parte esta situación genera una industria en torno a este proceso que genera grandes beneficios económicos, cuando se empieza a sugerir que quizás hay que devolver el parto expropiado, los intereses económicos se alzan como muros infranqueables, fomentando la ignorancia, presionando, contaminando, desposeyendo y usurpando.

Hay otra historia que necesita ser contada, hay algunas intervenciones que salvan a niños y mujeres, son un orgullo de nuestros avances y de nuestra inteligencia, cuando estás intervenciones se aplican de manera rutinaria o masiva, ponen en peligro a madres y niños y por lo tanto ambos necesitan de más intervenciones. Nuestro progreso reside en saber que no lo sabemos todo, en admitir que no se puede inventar una leche de laboratorio que sea igual a la que una madre produce y esto es extraordinario y maravilloso, jamás se podrá replicar el amor que yo siento por mi hijo de manera artificial, que no hay nada que pueda controlar el parto sin modificarlo, que no podemos predecir un parto, y esto no es un problema, ni una desventaja, es parte de lo extraordinario, de lo que se nos escapa y que debería dejarnos absortos que esto es magia, es vida y es sorpresa un material esencial contra el pesimismo y la depresión.
Es una pena que una gran parte de profesionales que trabajan en paritorios en hospitales no sepan, no hayan visto ni tengan experiencia profesional en lo que es un parto.

Y para todos aquellos que insisten en que les debemos algo, quisiera recordarles que las muertes que según ellos ya no existen no han sido erradicadas, fueron reducidas, por el uso de anticonceptivos, por la reducción de las practicas de abortos ilegales una mejor higiene y drogas para tratar las infecciones causadas por la falta de la misma.
La hemorragia posparto una de las cuatro razones de mortalidad entonces, se ha reducido gracias a ciertas drogas, pero le recordamos a nuestro querido mundo occidental, que esto sigue siendo una causa de mortalidad en el mundo en vías de desarrollo y este es una gran parte de nuestro mundo. También quisiera recordarles que una de las razones por las que Estados Unidos ha doblado su numero de mortalidad materna en los últimos veinte años, es porque un tercio de sus nacimientos son por cesárea (el doble de lo que les recomienda la OMS).

Por lo tanto, nuestras condiciones de supervivencia, pueden ser mejoradas, con higiene, tratando la infección si ocurre, y administrando una droga que pueda parar la hemorragia.
Y obviamente el poder hacer una cesárea en casos de absoluta necesidad.
Pero no hemos mejorado absolutamente nada por hacer episiotomías rutinarias, monitorización permanente, tumbar a la mujer de espaldas, administrarle oxitocina artificial y quitarle el control de la situación. Les hemos puesto en peligro, de hecho hemos empeorado psicologica y socialmente, en especial las mujeres y con ellas sus familias que creen que no pueden ni saben: parir, nacer, o sobrevivir. Y con estas familias y sobre esta constante negación edificamos nuestro mundo.

Hemos creado una sociedad dependiente, en una constante diálisis mental de leche en polvo, oxitocina sintética, de suplementos vitamínicos, y prevenciones del riesgo que no existe.

Nuestra libertad empieza en el nacimiento, nuestros bebés llevan una pulsera que los identifica, los identifica como el producto de un sistema, de una serie de intervenciones, llevan pulseras de plástico, porque en algún momento se les separará de sus padres, y por seguridad...¿hay mayor seguridad que la protección de los brazos de su madre?
Y si esos brazos no están ahí para protegerle, ¿no deberíamos preguntarnos por qué antes de ponerle una pulsera de plástico?.

El parto es el folclore, el lenguaje, la historia, el arte, el puente y la tradición de las mujeres. Es nuestra primera definición, nos hace conectar y pertenecer, es nuestro referente humano.
El parto es el momento de transición de una generación a otra y nos pertenece desde la normalidad y el respeto, si nacemos como una sociedad enferma, no nos queda otro futuro que crecer y morir como tal. Celebremos quien somos, celebremos la vida, celebremos el parto y a nuestros hijos, ¡La vida será una fiesta!

miércoles, 20 de octubre de 2010

SEMANA INTERNACIONAL SIN NESTLÉ

Nestlé es el objetivo de un boicot a la comercialización agresiva de leches infantiles en todo el mundo.
La Semana Internacional Sin-Nestlé (del 25 al 31 oct, 2010) es una semana para que aquellos que apoyan el boicot puedan hacer más para promoverlo y para que aquellos que no boicotean intenten hacerlo, al menos durante una semana, evitando consumir Nescafé, el principal objetivo del boicot, asi como otros productos de Nestlé.

Enviad un mensaje a Nestlé diciendo que están boicoteando para ayudar proteger a las madres y los bebés.

Ver plantilla aqui: https://docs.google.com/document/pub?id=1Vh7JBu8syEBYW7PTzIgIVsjViYhRFLUDbXYMypftQ9E

O utilizad el formulario en inglés aqui: http://info.babymilkaction.org/emailnestle

Nestlé es una de las cuatro empresas más boicoteadas del planeta, de acuerdo con GMI, y el boicot ha obligado a cambios importantes.

Durante la Semana Internacional Sin-Nestlé 2010, Baby Milk Action hace un llamamiento a la opinión pública para notificar a Nestlé sobre su última estrategia de marketing global con la leche artificial. Nestlé se dirige a las madres y los trabajadores de la salud con la afirmación de que sus leche artificial "protege a los bebés a pesar de que los bebés alimentados con fórmula son más propensos a enfermar que los bebés alimentados con leche materna y, en condiciones de pobreza, tienen más probabilídades de morir. Nestlé esta acusado de intentar quitar importancia al mensaje de que “el pecho es lo mejor” con su último comunicado que afirma que su leche artificial es "El nuevo “patrón oro" en la nutrición infantil" - véase el comunicado de prensa: http://info.babymilkaction.org/pressrelease/pressrelease10oct10

Nestlé también está acusado de negarse a proporcionar información importante a los padres y cuidadores que utilizan su lecha artificial.

Nestlé ya ha recibido miles de correos electrónicos, pero hasta el momento se niega a suspender esta campaña de marketing.

Ayuda a difundir esta convocatoria para aumentar la presión, particularmente durante la Semana Internacional Sin-Nestlé. Podeís añadir el banner y el logotipo Zona Libre de Nestlé a vuestra web o blog a través de la página de Baby Milk Action: http://info.babymilkaction.org/nestlefree

martes, 19 de octubre de 2010

"LA DOULA COMO AGENTE DE CAMBIO"

Por Nuria Otero Tomera.

Ponencia presentada dentro del marco de las
I Xornadas Universitarias Multidisciplinares para a Humanización do Parto (Universidade da Coruña) el 18 de Octubre de 2010.


Cuando preguntan qué es una doula, siempre contestamos que es una mujer que acompaña a otra en su proceso de convertirse en madre. Decimos que es una mujer que puede estar al lado de la madre, desde un punto de vista emocional, en cualquiera de los procesos que conforman la maternidad: la búsqueda de un hijo, el embarazo, el parto, el posparto o el difícil trance de la pérdida de un bebé.

La doula, en España, no está reconocida a nivel legal o profesional. Sólo está legitimada por el hecho, nada despreciable, de que cada vez más mujeres demandan su acompañamiento. Pero lo cierto es que ésta no es una figura nueva. La verdad es que si surge la figura de la doula es en respuesta a una necesidad. Y no es una necesidad creada o inventada.

Tradicionalmente, la mujer siempre ha estado acompañada en los distintos trances de la maternidad, pero esta labor de acompañamiento siempre se había llevado a cabo de forma espontánea, natural, no reglada, y no por mujeres específicamente dedicadas a ello.

Sin embargo, de una manera paulatina, y a través de la implicación de diversas causas como la imposición de la familia nuclear, las migraciones masivas y con ello la desvinculación de la familia de origen, la medicalización y hospitalización de los procesos de la maternidad, la irrupción del varón en los paritorios casi como una obligación y no como una opción, etc. etc. etc., empieza a hacerse sentir de forma consciente la necesidad de algo que antes era inconsciente y se hallaba colmado, como digo, de una manera natural y no planificada como necesidad sin identificar.

Ahora bien, las doulas, además de realizar su labor de manera específica, formada, organizada, con unos objetivos concretos para cada mujer a la que se acompaña, tienen otra diferencia fundamental con esa figura femenina que desde siempre ha estado acompañando a la mujer en su maternidad. Y es que las doulas, además del trabajo específico con cada mujer, tienen, como colectivo, a mi modo de ver, una doble e importante función: por un lado, como ya he comentado, la existencia de las doulas pone en evidencia una necesidad, una carencia de nuestros sistemas sanitario, social y familiar, y por otra, la existencia de las doulas, si la aprovechamos, puede ser utilizada como agente de cambio de esos sistemas.


Vamos por partes.

1. La doula como evidencia de una necesidad.

Las mujeres que nos dedicamos al acompañamiento no hemos decidido de motu propio inventarnos una ocupación. Muchas de nosotras, por no decir la mayoría, hemos llegado a este camino a través de haber sentido, en nuestro propio proceso, las carencias bien del sistema sanitario, del social o del familiar, cuando no de todos ellos a la vez. Asimismo, las mujeres que recurren a una doula demandan, cada una, que sea cubierta una necesidad diferente, pero que por la razón que sea no encuentran otro estamento o profesional que la cubra.

En este sentido, el hecho de que cada vez más mujeres contacten con una doula, pone de manifiesto una serie de carencias, necesidades o deficiencias. Podemos mencionar alguna de ellas para hacernos una idea:

*Falta de tiempo para una atención personalizada.

*Excesiva medicalización de procesos fisiológicos relacionados con la maternidad.

*Falta de referentes femeninos no contaminados por la imagen social dominante.

*Falta de redes femeninas cercanas y constantes.

*Desconexión de la mujer con el propio cuerpo y sus procesos.

*Intereses comerciales y económicos.


2. La doula como agente de cambio.

Como decía anteriormente… la existencia de las doulas, y el hecho de que cada vez más mujeres cuenten con una en su maternidad, pone en evidencia ciertas carencias.

Pero la idea no es regodearse en esas necesidades y dejar que sigan existiendo y sean cubiertas por un colectivo que está funcionando de una manera casi subterránea, invisible para el gran público. Las doulas debemos trabajar para propiciar el cambio, no sólo para aprovechar el hueco dejado por otros.

En este momento, al estar cerca de la madre y desligadas del sistema sanitario y sus obligaciones, tenemos la oportunidad, y la responsabilidad, no sólo de seguir evidenciando las deficiencias, sino de hacer algo para corregirlas. Debemos encontrar espacios de colaboración con los profesionales de la salud, pero también debemos trabajar para normalizar los procesos de la maternidad, que llevan tanto tiempo alejados de la mujer:

Reconectarnos con el embarazo y su naturalidad.

Aproximarnos al parto como una parte más de nuestra sexualidad y no como una enfermedad peligrosa que hay que pasar en un hospital hiper-tecnificado.

Conocernos y re-conocernos como mamíferas que saben y pueden alimentar a sus crías.

Aceptarnos y querernos como mujeres, con nuestra femineidad y nuestra fuerza, sin perder espacios públicos, sociales, políticos o domésticos.

Y por fin, volver a tejer las relaciones de conocimiento y sabiduría con otras mujeres, no para desaparecer de la escena, sino para aparecer en ella con protagonismo y empuje.

Las doulas acompañamos a las mujeres, sí, pero me gusta creer que también acompañamos a la sociedad en un cambio necesario para que la maternidad, y el nacimiento de nuestros hijos, sean tomados con la relevancia que de verdad tienen para nosotros. Y siempre digo lo mismo: ojalá, de verdad, ojalá algún día dejemos de ser necesarias. Ojalá las mujeres dejen de llamarnos. Será el mejor indicio de que hemos cumplido con nuestra misión.


Esta ponencia está dedicada a Jesusa Ricoy Olariaga, doula, educadora prenatal y amiga enciendecerillas. Que ha logrado prender en mí el fuego permanente del inconformismo.

Publicado en Ser Doulas. Link.

jueves, 7 de octubre de 2010

MANIFIESTO PARA LA REVOLUCIÓN MATERNAL

por Jesusa Ricoy-Olariaga



MANIFIESTO

Dedicado a todas las madres, a las comadronas, a los profesionales de las maternidades, a las mujeres, a nuestros hijos, pero sobre todo a madres reales que día a día escriben, hablan y organizan eventos desde la maternidad que les ha hecho saber que son capaces de parir mundos. Pero dedicado en especial a Nohemi, Ileana y Ana Isabel y a mis doulas Isabel y Nuria.


No pedimos disculpas ni pedimos permiso, de hecho no pedimos absolutamente nada.

Establecemos aquí y ahora que:

Nuestro cuerpo es nuestro y no un escaparate, ni un invento, ni una moda de otros.

Nuestro embarazo es nuestro y es un periodo en la mayor parte de las veces de salud y felicidad y no un continuo desasosiego.

Nuestro parto es nuestro y es un momento sagrado y de transición que requiere el más absoluto respeto. No se nos maneja, ni dirige, ni se nos interviene a no ser que sea absolutamente necesario, por comadronas que entienden y se han informado sobre esta necesidad.

Nuestra leche es nuestra, es irremplazable no entiende de intereses económicos, es nuestra historia, nuestro arte, nuestra cultura, nuestro vínculo y nuestra supervivencia.

Nuestros hijos son nuestros y no del Estado. Las decisiones en torno a su crianza y educación deben estar libres de presiones politicas, económicas o sociales.

Nuestro futuro es nuestro y la mujer para poder ser libre debe también serlo como madre, si el feminismo que nos trajo hasta aquí se dejó un trozo de nosotras en el camino no estamos en ningún sitio, no existimos.

Somos mujeres como colectivo, como hermanas, como tribu y no podemos perdernos por el camino.

Desde el útero, desde las entrañas y con el bebé en el brazo exigimos:

* Acabar con la promoción de falsos estereotipos de belleza, inventados por las industrias de la moda y de la pornografía y generados por ordenador .
* La integración social de la maternidad.
* La normalización del pecho como fuente de alimento de nuestra especie y contacto físico necesario para la madre y el bebé. Que la leche artificial se dé unicamente bajo prescripción facultativa.
* Que las madres puedan disfrutar de su maternidad y amamantamiento sin presiones económicas, políticas o sociales
* Que la mujer dé a luz en libertad y sin presiones externas, es decir, en su casa o en el hospital, y en sus propios términos siendo informada de sus opciones.
* Nadie puede tocar y mucho menos alimentar a nuestros bebés sin permiso y nadie puede interferir en nuestro espacio o tiempo para estar con nuestros bebés.
* Que la crianza y educación de nuestros hijos sea una prioridad social, re-evaluada y entendida desde el punto de vista fisiológico y respetando siempre las necesidades emocionales de los niños.
* Que los bebés y los niños sean amados y respetados socialmente, cualquier publicidad, publicación o similar que implique que el niño es un estorbo social es denigrante.
* Que la promoción y utilización de guarderías y centros en los que dejar a bebés menores de dos años se regularice teniendo en cuenta las necesidades fisiológicas y alimenticias del bebé recomendadas por la OMS y otros organismos similares, si para ello hay que alargar la baja maternal que así sea.
* Que la familia sea respetada y apoyada como lo que es, la base social que genera el futuro.


Para manifestar tu adhesión al manifiesto puedes enviar un email con tu nombre completo a rompiendoaguas@gmail.com indicando MANIFIESTO en el titulo. Gracias!
O nos podeís encontrar en Facebook

Construcción Natural

Extraído del Boletín de Septiembre de Yamay, Turismo Social y Ambientalmente Responsable.

En la localidad de Luis Beltrán en la provincia de Río Negro, el Consejo Deliberante sancionó una ordenanza municipal por la que se habilitó la metodología de construcción edilicia en tierra cruda (barro) en el ejido local.

Este trabajo legislativo inédito que llevó más de dos años de trabajo y participación comunitaria, capacitación, asistencia técnica y debate técnico, contó con el incansable trabajo de Jorge Belanko y el grupo de seguidores que van quedando en cada lugar donde se hacen talleres.

Pueden ver la nota completa en el sitio de la agencia de noticias de Bariloche y en el diario "El Ciudadano" de la misma localidad.

Aquí van los enlaces y a prepararse, que este y otros ejemplos en Córdoba y en Buenos Aires, son los primeros indicios de un cambio más profundo y amplio.

Novedosa ley permite construcción con tierra cruda

Provinciales: Aprueban la primera ley local para construir viviendas con tierra cruda

Dice la gente de Yamay:
¡A festejar y luego a construir!

miércoles, 6 de octubre de 2010

6 al 12 de Octubre - Semana Internacional de la Crianza en Brazos

Red Canguro

Bajo el lema "Feliz y seguro en tus brazos", estamos celebrando en estos días, la semana internacional de la crianza en brazos.

En esa frase se resume mucho de lo que los portabebés aportan al bebé. Cubre sus necesidades físicas y emocionales de contacto y cariño, a la vez que le proporciona el lugar más seguro donde completar su desarrollo.




La gestación fuera del útero-"La gestación Exterior"

La simple observación de un recién nacido clarifica su naturaleza indefensa. Necesita calor y alimento. No puede alejarse del peligro y no puede usar palabras para comunicar sus necesidades. Tiene el reto de usar su sistema nervioso para comprender el espacio y su relación con él, respirar por sí mismo para hacer circular el oxígeno y nutrientes a todo su cuerpo; para comer, digerir y eliminar residuos. Es evidente que el recién nacido pasa por una transformación que no se produce instantáneamente, sino gradualmente, mayoritariamente durante el primer año de su vida. Durante este tiempo debe ser llevado a todas partes. Todavía tiene un largo camino por recorrer antes de que pueda gestionarse por sí mismo. Esta relación simbiótica entre la madre y el bebé está “naturalmente diseñada para ser aún más intensa e interoperativa después del nacimiento” que durante su gestación en el útero (Montagu, 1988, 75).

"El nacimiento no sólo constituye el comienzo de la vida de la persona sino que conlleva el final de la gestación. El nacimiento representa una serie compleja y muy importante de cambios funcionales que sirven para preparar a los recién nacidos para el paso por el puente entre la gestación en el útero y la gestación que continuará fuera del útero." (Montagu, 1986, 57)

El bebé debe ser alimentado de una forma que represente lo más posible la intimidad del embarazo hasta que la gestación “exterior” (“gestatio”- latin, llevar o transportar) se ha completado. Esto significa que el bebé debe estar en proximidad constante con su madre, ya sea en los brazos de su madre o en contacto con el cuerpo de su madre gracias a un trozo de tela u otro portabebé.

Fragmento de "La exterogestación y la necesidad de ser llevado" El mejor lugar después del vientre materno. Artículo de Elizabeth Antunovic (©2009 NAP, Inc.). Traducido por Kangura.com, extraído de Red Canguro.


Buscar esta info y, fundamentalmente ver este video, me ha remitido a la primera infancia de mis hijos que hoy tienen 10 y 6 años respectivamente, y a la kepina que yo hice para ellos con la que cargué a ambos hasta sus casi dos años de edad.
Creo que después de los momentos de lactancia, estos son los recuerdos más dulces que tengo de las horas compartidas con mis niños.
Recordar la sensación de la cercanía con sus cuerpitos, sus olores, la tersura de sus pieles de bebés...
A cada uno de ellos hoy los disfruto inmensamente, pero el haber recorrido la ciudad con ellos a upa, el haberlos cargado en la kepina tanto tiempo, darles la teta ahí adentro en casa, de visita o en la calle, es un regalo que no sólo les hice a ellos aunque ya casi no lo recuerdan, sino que es un inmenso regalo que me hice a mi. Y es para toda la vida ♥
Creo que cargar a los niños en portabebés, no sólo es bueno para su desarrollo y todo lo que ya sabemos, sino que creo que también fomenta el amor =)

Amemos aún más a nuestros niños! Usemos portabebés!!!!